Quisiera empezar este escrito, con el más profundo de mis respetos. Esperando y deseando que cada día, sean menos los casos en que nuestros mayores, desaparecen de éste mundo sin que nos demos cuenta.
Hace dos días, mientras yo acavaba de llegar de mi "cocktail" diario con mis amigas (maravillosas todas ellas), descubro que en mi misma calle hay revoloteo de gente, diviso un coche de policía... algo ha pasado, y juraría que por el personal alli presente, nada bueno. Me voy acercando y diviso un camión de bomberos "cada vez se pone mas feo todo esto" (pensé), dirijo mi mirada hacia arriba, mi madre en el balcón me anuncia que algo no va bién. Subo las escaleras, impaciente por saber qué es lo que ha hecho que toda esa gente inunde la calle. Abro la puerta y le pregunto: "¿Qué sucede? ¿Y toda esta gente?..." mi madre, me responde con firmeza, aunque deseando que no sea asi: "Hace cuatro días que una anciana no sale de su casa, nadie sabe de ella y según sus vecinos... la escalera huele mal". Se me descompone la cara, no puedo creerlo, pienso dentro de mi que las cosas cada vez están peor, ¿en qué mundo vivimos?
Inevitablemente, el morbo nos mueve a todos por igual, aunque haya quién diga que esas cosas no despiertan su curiosidad, miente, miente de verdad, todos sentimos enorme atracción por lo que no conocemos, por la desgracia de los demás,... Y por ese motivo, salgo al balcón para saber, si realmente es lo que se sospecha, si esa anciana que compartía su casa con su perro; afable compañero, eterno amigo, quién nunca la dejó sola, había fallecido en la mas triste de las soledades. Tardó un rato en confirmarse, que evidentemente, su cuerpo sin vida reposaba encima de su cama y su Boby hacía guardia, a la espera que su dueña le diera de comer después de cuatro días durmiendo sin despertar ni por un segundo. Podía sentir el olor, ese olor que nadie que haya olido alguna vez, va a poder olvidar, nunca se olvida ese olor, y que rápido se reconoce cuando no es la primera vez que lo percibes...
¿Triste verdad? Sí, lo es, y yo pienso en mis abuelos, quienes tanto han sufrido por mi, cuánto me han cuidado cuando era una niña y ya siendo mayor, cuánto cariño me han aportado, dulzura, amor incondicional. Es un amor tan grande el que siente un anciano por la gente que les rodea... Dan todo para que nuestra vida, sea mucho mejor que la que les tocó vivir a ellos. Pero, ésta sociedad ya no está hecha para ellos, los hemos apartado, nos molestan... ¿verdad? Eso piensa mucha gente "son una carga". Cuán cruel puede llegar a ser el ser humano, qué egoísta, ser despreciable de todos los seres vivos que la tierra habitan, desagradecidos por naturaleza, apartamos a los que un día nos dieron la vida. Tristemente es así, si abrimos los ojos, vemos que es así.
Deseo, que algún día, todos seamos mejores personas en éste sentido, que cuidemos de nuestros mayores, como un día ellos lo hicieron con nosotros, y que nunca más alguien muera en la más triste soledad, sinó con alguien que le tienda la mano para poder despedirse como todos mereceríamos despedirnos de este mundo, acompañados.
No esperemos que nuestras comunidades huelan a cadáver, para darle solución a todo esto.
2 comentarios:
Ainssssssss...
Me siento orgullosa de ti, y no es por q tenga q enseñarte nada, no es por la "conversación" del otro día ( de la q salí mas tocada yo ), simplemente...porq me siento orgullosa de ti.
Te he dicho alguna vez q me encantas??
Creo q si, aunq solo a veces, lo sabe. ;)
PD: Quizás quién está por aprender sea yo.
Besos mil.
Tu? Por aprender? No creo!
Ya sabes... tengo golpes escondidos y a veces parece ser que también soy capaz de sorprender.
Supongo que tardarás unos días en contestarme, y solo deseo que todo te vaya genial estos días!!!!!!
P.D: Ya se que te encanto! :P
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